No cabe duda de que los tiempos están siendo muy difíciles para todos, y especialmente para el pequeño comercio que no ha sido capaz de adaptarse a los continuos cambios del entorno. Y no solo se trata del problema de los últimos meses causado por la COVID-19, sino que tradicionalmente, durante las últimas décadas, el mercado y el consumidor están sufriendo continuos y muy rápidos cambios, que exigen respuestas adecuadas de las empresas que quieran sobrevivir en este difícil y cambiante entorno.
A mi juicio, las respuestas para esta constante adaptación del sector retail en general, pero muy especialmente del pequeño comercio minorista, están en un adecuado conocimiento y gestión de las estrategias de marketing que permitan mejorar y adaptar la competitividad de sus empresas.
A menudo se escucha hablar en los medios de comunicación sobre el marketing de una forma despectiva, como si se tratara de un artilugio para engañar al consumidor que simplemente vende humo. Es muy habitual la frase “… es solo fruto del marketing” o “…es todo marketing”. Lamentablemente esa acepción de este concepto demuestra un gran desconocimiento e ignorancia sobre esta disciplina, que es vital para las empresas y que considero suele ser contundente para determinar el éxito o fracaso de cualquier negocio.
Lógicamente este erróneo concepto provoca confusión y falta de interés por aplicar las estrategias de marketing a los empresarios que no cuentan con una formación específica en gestión empresarial y/o en marketing.
El marketing es una disciplina muy amplia, y va mucho más allá de la idea equivocada de muchos de la publicidad y promoción, o ventas a alta presión. Las estrategias en relación al marketing para el retail implican, desde decisiones estratégicas que condicionarán el comercio desde el primer día, como por ejemplo la localización de la tienda o la selección del local, a aspectos más operativos y flexibles que podremos ir adaptando y renovando en función de otras muchas variables, como por ejemplo la gestión del surtido, precios, decisiones sobre omnicanalidad, digitalización, posicionamiento, atmósfera de compra, relaciones con el proveedor, atención al cliente, decoración y distribución del local, y así un largo etcétera que necesitamos conocer y controlar para seguir siendo competitivos.
En el Máster en Retail Marketing de la Universidad de Málaga, abordamos todos estos aspectos, y desde una perspectiva integradora de la tienda física con estrategias de e-commerce, ya que hoy día no debe pensarse de forma única en alguno de estos extremos. Y lo hacemos desde una orientación práctica y profesionalizada, impartido por un claustro de profesores compuesto por más de 30 directivos de importantes empresas del sector que aportan sus conocimientos y experiencia para formar a los interesados en especializarse en marketing aplicado al comercio.
Si eres profesional del sector y/o tienes tu propio comercio, además de ser una necesidad para tu supervivencia del negocio, es una gran oportunidad para formarte en un máster universitario, incluso aunque no poseas titulación previa. La UMA ofrece la posibilidad de acceder a estos profesionales acreditando su experiencia en el sector.
